Manga: Kyoukai no Rinne (Final)

Por fin terminé de leer Kyoukai no Rinne y no me di ni cuenta, pero pasé 10 años leyendo esto. No lo puedo creer... Así que ahora traigo mi opinión sobre el final. Con SPOILERS.

Finalmente Rumiko Takahashi terminó este manga con 398 capítulos publicados entre 2009 y 2017 y reunidos en 40 volúmenes, pero como ya he hablado bastante de qué se trata y de sus personajes cuando hablé del anime (T1, T2, T3) me voy directo a hablar del tomo 40.

Me pareció muy, pero que muy tierno. 💗 Rinne se gana un tour para dos personas en el otro mundo y lo primero que piensa es en cambiarlo por dinero para comprar comida, pero después se le ocurre que puede ir con Sakura para agradecerle por todo el dinero que le ha prestado. Así que van felices, hasta que Rinne empieza a preocuparse porque el tour no está saliendo como él quería y no pueden comer nada porque las abuelas del tour son más rápidas 😂. Pero Sakura lleva comida y Rinne ¡puede comer sin que nada lo interrumpa! 😄. Entonces Sakura ve algo brillante en el Río Sanzu y es una piedra limítrofe que hace que el río fluya hacia arriba. Rinne la recoge para Sakura y aparece una chica que les ofrece hacerles brazaletes con las piedras, así que Rinne, a pesar de la sangre derramada por el gasto, compra dos.

Más tarde, los dos se alegran tanto de ver que el otro usa el brazalete, ¡qué tiernos! 💗, pero una extraña pintura hace de las suyas y el brazalete de Rinne termina vendido y Sakura lo ve en una tienda. Entonces, ella se siente pésimo y como Rinne no se ha dado cuenta de lo que pasa actúa como si nada y Sakura termina gritándole a Rinne. Ella, que nunca muestra sus emociones, llegó hasta ese punto. Y el pobre Rinne sufre y sufre. Es tan cruel, porque Rinne siempre es tan lindo y puro, y tiene que pasar por tremendas desgracias que causan que Sakura lo crea lo peor.

De ahí pasan puros malentendidos. Cuando Sakura se entera de la verdad de la venta del brazalete se siente mal por haberle gritado a Rinne y como él le dejó una carta en la que le agradecía y le devolvía todo su dinero y no ha ido a clases, ella piensa que no va a volver más. Y los malentendidos aumentan cuando Sabato toma la piedra de Rinne para hacer un Río Sanzu portátil con ella y llevarse almas del mundo humano.

Después de varias idas y venidas, donde Sakura y Rinne piensan que el otro lo odia y donde Rinne trata de detener los planes de Sabato con el Río Sanzu portátil; Sakura está en peligro de irse a la Rueda de la Reencarnación y renacer, así que Rinne va a buscarla todo desesperado y cuando la encuentra, la abraza.

Para este final yo esperaba lo peor, porque había leído comentarios quejándose de que el final no existía, entonces esperaba que no quedara en nada. Pero pasan bastantes cosas que le dan cierre a algunas historias: Renge dejó de ser damashigami y ahora trabaja feliz con su Kain-sempai, la Compañía Damashigami se cerró, Rinne aprobó el examen de shinigami y subió de nivel, así que ahora le pagan más, Sakura reconoce que le gusta mucho Rinne y después del abrazo ella nos cuenta que las cosas cambiaron y nos enteramos que ahora tienen citas. La verdad es que para algo tan livianito como lo es este manga yo no pido más y quedé conforme con el final. Era obvio que beso no iba a haber, si ni en Inuyasha hubo (hablo del manga) donde el romance tenía mucha más importancia que acá.

En general es un manga que disfruté mucho, pero que tampoco me volvió loca y eché mucho de menos eso. Nunca generó en mí esa expectación por saber que pasaría en el siguiente capítulo, porque todas son historias cortas y muy independientes, donde vemos muy poco desarrollo de personajes. Otro punto que tuvo mucho que ver en que jamás me enganchara fue el romance, porque es casi inexistente, a Rinne le gusta Sakura casi desde el inicio, pero Sakura no deja ver mucho de lo que pasa con ella y son muy poquitos los capítulos que se enfocan en su lado amoroso.

Rinne es el protagonista más tierno que le he leído hasta ahora a Rumiko-sensei, él siempre es amable con Sakura, nunca una mala palabra para ella, nunca un mal pensamiento, siempre inocente y dulce; y Sakura es siempre tranquila y más bien seria. Aunque me gusta mucho como es Rinne, la dinámica de los dos con Sakura, no me resultó tan atractiva; es bueno ver un cambio después de que las personalidades de los protagonistas de sus dos anteriores trabajos largos (Ranma ½ e Inuyasha) fueran prácticamente iguales, pero siempre sentí que les faltaba chispa y me costó mucho acostumbrarme a Sakura y su poker face. Tuvieron que pasar muchos capítulos para que le encontrara la gracia al asunto y me alegré de que lentamente ella empezara a mostrar más emociones.

Lo mejor es el humor que me sacó unas buenas sonrisas y carcajadas, sus personajes divertidos y su tono tan ligero y sin complicaciones.

Calificación:

🌟🌟🌟🌟⚝