Lecturas de Mayo '19

• Novelas que terminé de leer este mes  • 

📖 📕📗📘📙

Papelucho - Marcela Paz
Papelucho #1

—Otra vez es de noche y ya debería esta durmiendo. Pensando en lo que dijo la Domitila, he decidido escribirle a "nadie", como ella dice, y que es lo que otros llaman su "diario"...

Con apenas ocho años, Papelucho decide escribir sobre las cosas que le pasan a él, a su familia y, por supuesto, a su nana, la Domitila. En estas páginas, él se atreve a contar lo que no puede decirle a nadie. Se atreve a expresar lo que piensa sobre los adultos y a volcar sus sentimientos más profundos. 

Lo escribe en secreto y en detalle. 

Así uno se entera de que él cree que sin querer envenenó a la Domitila, que tiene un criadero de jaibitas debajo de las chombas en el armario y que va a ayudar económicamente a su familia haciéndose pasar por un cieguito... "de esos con vista al cielo"... 

A Papelucho se le ocurren las ideas más geniales e increíbles. Pero si sus papás no lo entienden y piensan que son sólo travesuras de niño, él se desahoga escribiendo en su diario. Deja ver el corazón de oro que tiene, la tremenda imaginación y su firme propósito de nunca, pero nunca aburrirse.

Estoy leyendo otra vez los Papeluchos, los leí todos cuando chica, pero ahora me dio por leerlos otra vez y ver si encuentro cosas nuevas con mi visión de adulta. La verdad es que no encontré ninguna. 😄 Pero me siguen pareciendo tan entretenidos como cuando era chica y me daba tanta risa.

Papelucho se mete en una y otra tontera, situaciones realmente peligrosas como disparar por error el revolver del papá o casi prenderle fuego a la casa de la tía Rosarito con su fogata. Es que Papelucho no tenía videojuegos ni internet para entretenerse, entonces a veces se le salían las cosas de control con sus ideas, pero nada que hiciera a propósito, sus travesuras son todas resultado de las mejores intenciones. Papelucho es tan de la vieja escuela, siento verdadero gusto de verlo con sus criaderos de jaibitas, sus inventos con la lámpara y el teléfono, y sus juegos con los vecinos. Y tan generoso que es, me encanta eso de él, siempre regalando cosas, aunque se aprovechan de él y ni cuenta se da, pero mejor porque así vive feliz.

Me reí mucho con las vacaciones de Papelucho y sus pantalones aceitados, con sus vivencias en el internado creyendo que hay fantasmas o escribiendo la revista Chistelandia y yo que sigo siendo una fiel escritora de diarios de vida, me sentí pésimo cuando Urquieta le sacó el diario a Papelucho para reírse leyéndolo.

Aquí uno de los momentos que más gracia me hicieron.

Resulta que por suerte se reventó el cálifont, porque, si no, no sé qué habríamos hecho de puro aburridos. Fue estupendo. Era como bomba atómica y la Domitila se desmayó y el agua hirviendo saltaba como de un pozo de petróleo. Pero después hubo una pelea entre la Gladys, la vecina, y la Domitila y por suerte perdió la Gladys (...) Y la Domitila cree que la Gladys va a venir a matarla, así es que yo le traje el revólver de mi papá para que se defienda. Pero, cuando lo estaba mirando, se salió un tiro y se hizo un agujero en la pared y como la casa es vieja se cayó un buen pedazo (...) Ya me confesé y no era pecado lo del disparo. Cuando llegó el papá le pregunté: "¿Sentiste el temblor?", y él me dijo que no. Yo no dije que había temblado, pero de todas maneras él creyó que el pedazo de pared se cayó con el temblor. Eso no es mentira. 

 Calificación:

🌟🌟🌟🌟🌟

Mujercitas - Louisa May Alcott

Mujercitas, el clásico de Louisa May Alcott ambientado en la guerra de Secesión, fue publicado en Estados Unidos en 1868. Han pasado casi ciento cincuenta años desde entonces, pero la complicidad de las cuatro hermanas March -Meg, Beth, Amy y Jo- con las demás mujeres no ha muerto. Es más, autoras de la talla de Simone de Beauvoir y Joyce Carol Oates han sido admiradoras entusiastas de esas mujercitas que en sus gestos y palabras resumen el espíritu crítico de una época, y aún hoy pueden regalarnos unas hermosas horas de lectura.

Otra relectura. Me compré la versión íntegra que trae Mujercitas y Aquellas mujercitas en un solo libro, además de partes que fueron eliminadas en una reedición que fue la que se usó para las traducciones al español. Resulta bastante irónico que en la novela, a Jo le hacen sacar las partes morales del libro que escribió para que se lo publiquen y fueron justo esas partes las que le cortaron a la autora en esa reedición, aquellas donde habla de temas morales y donde menciona a Dios.

A partir de aquí MUCHOS SPOILERS:

Aunque he leído muchas veces la primera parte (Mujercitas), la segunda (Aquellas mujercitas) la leí una sola vez y no la quise volver a tocar nunca más, porque me encontré con cosas me dolieron mucho. Pasó mucho tiempo entre que leí una parte y la otra, así que pasé años creyendo que Jo y Laurie se casarían al final y cuanto descubrí que no era así reaccioné igual como lo hice ahora y peor porque ahora por lo menos estaba preparada, pero ahí me cayó como un balde de agua fría. Lloré a mares y no recordaba que tanto, hasta que las lágrimas de ahora me trajeron los recuerdos de las de aquel entonces. Veo que soy bastante consecuente con mis emociones...

Leí muy contenta por reencontrarme con esta historia, pero también con algo de angustia. Me demoré mucho en leerlo porque como ya sabía lo que venía tenía miedo de avanzar y finalmente llegar a la parte que no me gustaba.

Empecé a llorar en el capítulo en que Jo rechaza a Laurie y seguí llorando hasta el final (excepto en los capítulos de Meg y su familia, aunque también sentía un poco de pesar porque recordaba lo que pasa en Hombrecitos) por la frustración de que Jo y Laurie no se quedaran juntos, todavía más porque el se quedara con Amy y de pena por Beth, porque para sumarle a la cosa, Beth muere después de nunca recuperar la fuerza tras la escarlatina. ¡Odio a los Hummel!

También me compré esta bonita edición de
tapa dura con ilustraciones a color.

Es que Amy siempre fue mi hermana menos favorita. Muchas veces la encontré insoportable y nunca le perdoné que quemara el manuscrito de Jo. No puedo creer que además de un gran viaje por Europa también consiguió al mejor chico de la historia; cosas que yo quería para Jo. Si por lo menos, Laurie se hubiera casado con otra chica X no me sentiría tan enojada, ¡¿por qué tenía que ser con Amy?! Me parece antinatural. Puedo entender que Jo no se enamorara de Laurie, después de todo muchas veces se veía eso maternal que sentía ella por él, pero no puedo entender ni aceptar que Laurie y Amy se enamoraran.

A diferencia de lo que creen Jo y su mamá, a mí me parecía que Jo y Laurie eran la pareja perfecta y que los dos pierden mucho al lado de Amy y el profesor Bhaer que muy bueno será, pero no me termina de convencer.

Tengo como sentimientos encontrados. Esta es la primera vez que lo leo siendo adulta y hay cosas que me chocaron un poco, como que Jo dejara de lado sus escritos hasta tiempo indefinido, siendo que siempre fue su gran sueño, por un sueño que ella ve más aterrizado: formar una familia y una escuela para hacer el bien a otros. También Laurie y Amy dejan la música y el arte cuando se dan cuenta que no son genios en ello y deciden ocupar su tiempo en el altruismo. Al principio me dio la impresión de que la autora tuviera una visión negativa del desarrollo artístico (y quizás sea así), pero creo entender que el verdadero mensaje es que se es más feliz haciendo feliz a otros y trabajando por otros que satisfaciendo la propia vanidad con el arte. Y bueno, puedo estar de acuerdo o no, pero los personajes son realmente felices con lo que eligieron y reemplazaron un sueño por otro que los llenaba más, pero sin cerrarle la puerta tampoco a las aficiones artísticas.

A pesar de todo lo que lloré, sigo encontrando esta novela tremendamente bella y cálida, y tan cercana a pesar de haber sido escrita hace más de 150 años, creo que todos se podrán identificar con al menos una de las situaciones que viven las hermanas o con sus caracteres o personalidades. Y a pesar de que la situación de las mujeres en esa época era otra y, sobretodo en la segunda parte, el libro las describecomo entregadas al hogar, no dejan de aparecer muestras de apoyo a las mujeres trabajadoras e incluso a la participación de los hombres en el cuidado de los hijos, después de todo la autora era una defensora de los derechos de las mujeres.

Como última cosa que decir, me sorprendió que en todas las otra lecturas la que más me interesaba era Meg, porque es la única que tiene historia romántica en la primera parte, pero ahora me apegué mucho más a Jo.

Calificación:

🌟🌟🌟🌟🌟 para la primera parte y

🌟🌟🌟⚝⚝ para la segunda

Papelucho casi huérfano - Marcela Paz
Papelucho #2

"No había escrito mi diario de la rabia que tengo y de la pena. Resulta que mi papá y mi mamá se fueron a Estados Unidos (...) Y a mí me dejaron con la tía Rosarito en el campo. Así que ahora soy casi huérfano".

¡Pobre Papelucho! Su familia organizó un viaje relámpago fuera del país y, como no lo pudieron llevar, lo dejaron al cuidado de una tía viejísima. Lejos de su casa y de sus parientes cercanos, él decide que no quiere y no le conviene vivir enojado y triste. Más vale sacar el mejor partido a esta nueva experiencia y, en el mes y medio que permanece en el campo, aprende, entre cosas, a tirarse de cabeza al tranque y a no tenerle miedo ni a los fantasmas. Valiente, revoltoso y tan imaginativo como siempre, Papelucho revoluciona la tranquila vida de su tía. 

Y como se siente muchas veces incomprendido, se hace amigo del Napoleón, un perro cojo que vive independiente y feliz. Esta mascota improvisada le da a Papelucho todo el cariño que echa de menos, acompañándolo hasta la llegada de sus papás.

Cuando chica me daba tanta rabia que dejaran a Papelucho en Chile y se fueran a Estados Unidos, pero no me acordaba por qué se fueron y me quedó la duda de si se van porque Javier está muy enfermo y allá lo van a ver los doctores, si se van por negocios o simplemente en viaje de placer ahora que son millonarios. Como sea, Papelucho hace tantas cosas divertidas en el campo que no lo pensé más.

El Napoleón es lo mejor de este libro, todos los momentos en lo que interviene el perrito de tres patas me sacaban carcajadas, como cuando Papelucho arma con él la Socopebue (Sociedad Conyugal de Perros Buenos 😂), cuando todos los perros se meten a la cocina de la tía Rosarito o cuando Papelucho quiere irse con el Napoleón y los hijos de él, pero el Napoleón "no sabe bien cuáles son, pero todos los que nos sigan a los dos, fijo que son de él". Me gustó mucho el personaje del cura que en los dos libros que he leído hasta ahora es de los pocos adultos que le tienen paciencia a Papelucho y que tienen una relación bonita con él. Y qué risa cuando a Papelucho le dicen que los muertos hablan, así que va a abrir el ataúd de la persona que están velando en la parroquia y se cae con cajón y todo😂.

Otros momentos para el recuerdo:

Yo hice promesa de no comprar dulces si le salía la otra para al Napoleón, porque yo sé que los demás perros le hacen burla. Pero a él no le importa mucho. En todo caso, sería peor que le faltaran dos patas, porque entonces tendría que andar como la gente y eso sí que sería una vergüenza. 

—¿Te gustaría que te comprara un chocolate? —Me encantaría —le dije y paramos en la plaza y ella me dio una moneda para que me comprara algo y no alcanzó la plata así que compré dos chicles, uno para cada uno. Y eran de esos chicles que traban los dientes y se nos pegaron las muelas de arriba con las de abajo y no había caso. A la Tía se le cayó la plancha de dientes y yo no le podía contestar, forcejeando y forcejeando hasta que se me salió la tapadura.

Calificación:

🌟🌟🌟🌟🌟